Muchas personas han podido observar en primera persona las impresionantes estatuas de los antiguos gobernantes de Mesopotamia en el Louvre y el Museo Británico. Estos objetos evidencian la riqueza de las ciudades-estado acadias y sumerias en la Edad del Bronce, es decir, hace más de cuatro mil años. Muchos de estos objetos están realizados con diorita negra y gabro, tipos de roca que no se encuentran en la actual región de Irak y el noreste de Siria. ¿De dónde vinieron? Los bloques de piedra debieron haber sido transportados a lo largo de antiguos caminos desde lejanas distancias hasta las ciudades mesopotámicas de la Edad del Bronce.
Código de Hammurabi en diorita negra
Estatua de gudea en diorita negra
Un equipo de investigadores de la Universidad alemana de Tubinga ha estudiado los orígenes de las piedras y los métodos usados para mover enormes fragmentos de roca sobre largas distancias. El equipo de la Universidad de Tubinga colaboró con el Centro Iraní de Investigación Arqueológica (ICAR) para hallar las respuestas y estuvo dirigido conjuntamente por los profesores Peter Pfälzner y Nader Soleimani.
Los arquólogos han encontrado diorita y gabro en la provincia iraní de Kerman, no muy lejos del Golfo Pérsico, que coincide con la utilizada en las estatuas de Mesopotamia. En la misma zona, los arqueólogos también han encontrado depósitos de clorita, que se utilizaba para hacer vasijas de piedra que se comerciaron en lugares tan lejanos como Mesopotamia y el Levante mediterráneo. Cerca de estos depósitos, los investigadores han hallado petroglifos y asentamientos datados en la Temprana Edad del Bronce, lo que indica que la piedra fue extraída durante el periodo en que la Cultura Jiroft se desarrolló en el sureste de Irán (aproximadamente entre el 3000-2000 a.C.), y que fue intercambiada en todo el Próximo Oriente antiguo.
Llanura de Jiroft
Uno de los asentamientos recientemente descubiertos puede haber sido un centro de producción y distribución de las valiosas piedras. "Esto demuestra que las civilizaciones de Mesopotamia y el sureste de Irán estaban en contacto directo durante la Temprana Edad del Bronce", indicó el profesor Pfalzner del Instituto de Estudios del Próximo Oriente Antiguo. "El Golfo Pérsico sirvió muy probablemente como ruta comercial" añadió Pfalzner, ilustrando la gran importancia de esta vía fluvial/marítima en las relaciones internacionales entre importantes regiones desde la Edad del Bronce hasta nuestros días.
Restos cerámicos en uno de los nuevos asentamientos descubiertos en la llanura de Jiroft
Pfalzner y su colega iraní Nader Soleimani están dirigiendo conjuntamente la investigación en un área de 110 x 120 kilometros en la provincia iraní de Kerman - tanto por tierra como desde el aire con aviones no tripulados. Hasta ahora ha habido muy poca investigación arqueológica en esta calida y seca región emplazada al sur de la ciudad de Jiroft. A partir del uso de la fotografía aérea, el equipo está creando modelos en 3D de los antiguos asentamientos de la época en que se desarrolló la cultura de Jiroft y de otros periodos históricos que se datan hasta la llegada del Islam. A lo largo de las posibles rutas comerciales que corrieron entre las altas cadenas montañosas de la costa del Golfo Pérsico, el equipo está investigando la posibilidad de hallar estaciones y cualquier otra actividad comercial. La investigación, hasta el momento, ha hallado 42 asentamientos. Como las investigaciones iniciales han dado resultados, el trabajo se reestablecera en febrero de 2016. Los investigadores tienen la esperanza de encontrar más información acerca de por dónde corrieron las rutas comerciales de la Edad de Bronce entre la cultura Jiroft y las ciudades-estado de Mesopotamia, así como qué tipo de efectos tuvo este comercio a larga distancia en las civilizaciones iraníes de hace más de cuatro mil años.
El río Halil Rud, sustento vital para la cultura de Jiroft durante la Edad del Bronce
Investigadores encuentran una rica veta de clorita, la cual fue convertida en la antigüedad en vasijas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario